Rochester, Minnesota - Las uñas de las manos quebradizas generalmente pueden fortalecerse con algunas medidas básicas de autocuidado. Si pese a intentar con esas técnicas usted no observa ninguna mejoría después de un mes, considere hablar con su médico o acudir al dermatólogo.

Las uñas son parte de la piel, están compuestas por capas de la proteína queratina y crecen desde la zona de la base ungueal que está debajo de la cutícula. A medida que las nuevas células crecen, las viejas se endurecen y compactan hasta terminar saliendo por la punta de los dedos. Las uñas sanas son lisas, no rugosas ni agrietadas y tampoco tienen manchas ni decoloración.

Ilustración médica de la punta de un dedo y una uña en corte transversal

Ilustración médica de la punta de un dedo y una uña en corte transversal; de izquierda a derecha: raíz ungueal, cutícula, cuerpo ungueal y lecho ungueal

Las uñas de las manos pueden volverse débiles o quebradizas cuando se enfrentan a situaciones duras; por ejemplo: el uso regular de removedor de esmalte de uñas con acetona puede con el tiempo desgastar las uñas; la repetida exposición a temperaturas muy calientes o muy frías también puede ser adverso para las uñas; el contacto frecuente con sustancias químicas, tales como las contenidas por muchos productos de limpieza, puede debilitar las uñas; y cuando se sumerge las uñas en agua durante períodos de tiempo prolongados, eso puede hacerlas proclives a partirse.

A fin de ayudar a fortalecer las uñas, trátelas con la mayor suavidad posible. Póngase guantes para lavar los platos o usar productos de limpieza. Si usa removedor de esmalte de uñas, elija uno que no contenga acetona. Aplíquese a diario humectante en las uñas y las cutículas. Además, aplicarse un producto para endurecer las uñas puede ayudar a hacerlas más resistentes a quebrarse o partirse, y las vuelve más fuertes.

Las uñas débiles, a veces, pueden ser el resultado de una infección. A fin de evitar que crezcan bacterias debajo de las uñas de las manos, manténgalas limpias y secas. No se muerda las uñas ni hale las cutículas porque esos hábitos pueden lesionar el lecho ungueal y permitir el ingreso de bacterias y hongos, provocando una infección. Si tiene padrastros, córtelos con cuidado porque puede arrancar tejido vivo junto con ellos y causar un daño que aumenta el riesgo de infección.

Mantenga las uñas de las manos muy bien cortadas y redondeadas con una suave curva en la punta. Si desea hacerse la manicura, elija un salón de belleza con autorización de funcionamiento vigente y busque solo a manicuros calificados. No permita que le corten las cutículas durante la manicura, porque eso puede conducir a una infección de la uña. Verifique también que se esterilicen bien todos los instrumentos utilizados en la manicura para evitar la propagación de infecciones.

Ilustración médica de psoriasis en la uña

Si todos los esfuerzos por fortalecer las uñas de las manos fuesen inútiles o si los problemas de las uñas parecieran estar relacionados con otros síntomas, acuda al médico o al dermatólogo. Ese profesional puede recomendarle el suplemento nutricional biotina, sobre el que algunos estudios plantean que podría reforzar las uñas débiles y quebradizas.

Según su historial médico y salud general, entre otros factores, el médico también puede realizarle una evaluación más exhaustiva para ver si las uñas quebradizas se relacionan con otro problema subyacente. Por ejemplo, algunos cambios en las uñas pueden apuntar hacia un trastorno de la piel que también afecta las uñas, entre ellos: la psoriasis que es un trastorno común de la piel que provoca acumulación de las células dérmicas; el líquen plano que es una afección inflamatoria capaz de afectar la piel; y la dermatitis que es otro trastorno inflamatorio de la piel. Estos son apenas unos ejemplos y todos pueden aparecer en las uñas.

El médico puede valorar sus uñas y ayudarle a determinar si lo adecuado en su caso sería investigar más a fondo el asunto.

Dra. Dawn Davis, Dermatología de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota.