Scottsdale, Arizona - Los quistes de ovario hemorrágicos se presentan en las mujeres que todavía no han atravesado por la menopausia y son resultado de la ovulación. No es claro por qué algunas mujeres desarrollan esos quistes y otras no. El tratamiento para los quistes de ovario hemorrágicos depende del tamaño del quiste y de si provoca síntomas. Los quistes normalmente no repercuten sobre la fertilidad femenina.

Los ovarios se ubican a cada lado del útero y ambos tienen el tamaño y la forma de una almendra. Los óvulos, también conocidos como ovocitos, se desarrollan y maduran en los ovarios y luego son liberados en ciclos mensuales durante los años reproductivos de la mujer. Los quistes ováricos son bolsas o sacos llenos de líquido que se forman dentro o en la superficie del ovario. Los quistes de ovario hemorrágicos se desarrollan durante la ovulación, cuando el óvulo es liberado por un folículo ovárico en la superficie y dicho folículo sangra hasta convertirse en quiste. Los médicos no saben por qué ocurre esto.

El hecho de tener un quiste de ovario hemorrágico no necesariamente representa un problema. Muchas veces, esos quistes no causan ningún síntoma y, a menudo, se descubren durante un examen pélvico que se realiza por otro motivo. Cuando el quiste es de tamaño pequeño o mediano y no ocasiona ningún dolor ni otros síntomas, el médico muy posiblemente recomendará controlarlo. Dicho control suele implicar hacer una ecografía pélvica cada pocos meses para ver si el quiste ha cambiado de tamaño. Normalmente no se requiere ningún otro tratamiento y en muchos casos, el quiste desaparece por sí solo después de pocos meses.

Cuando el tamaño del quiste es mayor a 10 centímetros aproximadamente, o cuando provoca dolor,  sensación de llenura en la pelvis u otros síntomas, entonces los médicos suelen recomendar una cirugía para extraerlo. Algunos quistes pueden extraerse sin extirpar todo el ovario; no obstante, cuando el quiste ha dañado el ovario hasta el punto en que el tejido sano ya es insalvable, el cirujano extirpa todo el ovario.

De manera general, los quistes hemorrágicos no repercuten negativamente sobre la fertilidad. Aunque necesite que se le extirpe un ovario, mientras el otro ovario permanezca sano, usted posiblemente sea capaz de concebir, siempre y cuando no padezca otros problemas médicos que puedan afectar la fertilidad. La única vez en que los quistes de ovario hemorrágicos pueden ser un problema para la fertilidad es cuando los quistes se desarrollan en los dos ovarios y es preciso extirparlos a ambos.

No existe ninguna manera comprobada de prevenir el desarrollo de nuevos quistes de ovario hemorrágicos. Algunas pruebas plantean que suprimir la ovulación a través de pastillas anticonceptivas puede disminuir el riesgo de quistes ováricos, pero eso no siempre surte efecto.

Someterse regularmente a exámenes pélvicos es una manera de asegurarse que cualquier cambio nuevo en los ovarios, incluso nuevos quistes, sea detectado lo antes posible. Aparte de esos exámenes, preste atención a todo cambio en el ciclo mensual, tal como la presencia de síntomas que acompañan a la menstruación y no son normales en usted o duran más de pocos ciclos. Los síntomas que debe vigilar incluyen dolor pélvico constante, sensación de llenura o pesadez en la pelvis y dolor durante las relaciones sexuales o la defecación. Consulte al médico acerca de cualquier síntoma o cambio que observe.  

Dra. Kristina Butler, Obstetricia y Ginecología de Mayo Clinic en Scottsdale, Arizona.